La mochila de Doraimon

[Juan Carlos Rico Leonor]

Aquella mañana al entrar en su despacho después de haber apagado los "mil fuegos" que cada día se le presentan a María, Directora novel, se encontró con las cajas de los portátiles del Proyecto "Escuela 2.0" para los compañeros. Abrió una y cogió una de las mochilas que una vez tengan el portatil dentro pasarán a ser "mochilas digitales". Cerró la puerta un momento a sabiendas de que ya había varios padres y madres esperando hablar con ella. se sentó y se convirtió imaginariamente en Doraimon, ese personaje de los dibujos animados que todos hemos soñado tener en nuestra habitación. Y cerrando los ojos encendíó un botón en la mochila y apareció una pantalla de tv con 30 pantallitas cada una de un aula, con el desarrollo de las clases en directo. Y tocó en el de al lado y se puso en marcha un GPS localizador que le indicó las coordenadas de donde se encontraba ciertamente el compañero que le había pedido permiso hacia unos minutos por teléfono. Y en un tercer botón pudo mandar un SMS global a todos los padres confirmando la presencia en las aulas, que para eso había arcos de identificación digital en la entrada. Y por último envió otro al programa de gestión Séneca con los datos de los Profesores que habían fichado esa mañana y la petición de un sustituto o sustituta para la maestra de Infantil con la gripe A. Despertó de su breve sueño cuando la Srta de 3º aporreó la puerta con Marcos que como cada día se había dejado la mochila con el material y los libros en su casa. Le invadíó la sensación certera de que lo que había soñado llegará a las aulas, de hecho algunas ya han llegado y aún así ella estaba segura de que la escuela es una de las organizaciones que menos cambios ha tenido en los dos últimos siglos y no alcanzaba a saber porqué. Hay muchas autores que coinciden en que si alguien del siglo XVIII resucitase en la actualidad, en el único escenario en el que no se moriría del susto es en el aula de un colegio.. Sin embargo, al igual que el saber del mundo se duplica con una periodicidad impensable hace solo 10 años, hay elementos en esta vieja escuela que atisban cierta modernidad educativa y que nos mantienen con un hilo fino conectados a la nueva sociedad del conocimiento.¡qué bien quedan las pizarras de tiza al lado de las digitales, testigos mudos del cambio del tiempo!.

Hargreaves ha dicho que si los Directores y Directoras no apuestan por las nuevas tecnologias, echaremos a los alumnos de las aulas, no querrán escuchar conocimientos insitu al Profesor cuando pueden buscar a la carta en internet. Simplemente se aburrirán. Cuando la web 3.0, que estará marcada por la semántica y la inmediatez, vuelva a agrandar más la fractura digital, los docentes tendremos que cambiar definitivamente nuestra visión sobre la competencia digital y pensar que no es suficiente la eterna queja de los descontentos y que cada vez quedan menos escusas para dar el salto cualitativo en la formación digital. O cargamos la mochila digital con la cultura de la ilusión docente y dejamos fuera de ella la cantinela de las bajas, de que la administración reparte mal los recursos, de que la comunidad educativa está frente a mi, con todo lo que hay de razón para dicha queja, o la cruda realidad acabará por engullirnos. En Andalucía, como en todo el Pais, los Profesores y Profesoras de 5º y 6º de Primaria van a tener una nueva oportunidad de subirse al carro de las nuevas tecnologías y es obligación de sus Directores y Directoras el asesorar y guiar ese proceso. Para hacer bien la labor de líderes pedagógicos tienen que dar su ejemplo. Y así se deberán ir acostumbrando al manejo de una tecnología que puede ser clave en su gestión y administración y didácticamente muy rica, más allá del empleo de libros virtuales. Al Director se le presuponen ciertos dominios, como el valor a los soldados, pero es ciertamente descorazonador comprobar la baja competencia digital de la mayoría, incluso la de aquellos que han sido Directores y Directoras de Centros TIC. Me consta, como dato que la asistencia de Directores y Directoras a cursos TIC durante estos 6 años en Andalucía no ha superado el 20%. Siempre había otras cosas que hacer. Es una buena ocasión para ponerse a la altura, acudiendo a la formación planteada para este Proyecto y apostando por marcar una linea clara de actuaciones digitales en los Proyectos Educativos de sus Centros. Si volvemos a perder el tren, este ambicioso plan volverá a encontrarse con los zarpazos de la desgana, de las excusas y de los balones fuera...