En cierta ocasión varias grandes empresas alemanas organizaron un seminario sobre estrategia comercial y economía al que invitaron a diferentes ponentes de postín. Entre ellos estaba Reinhold Mesnner , afamado alpinista: el primer hombre que subio el Everest sin oxígeno, primero en subir las catorce cumbres del Himalaya con más de 8.000 metros de altura o cruzar la Antártida en esquís.Se limitó a contar sus experiencias en la montaña, pero en un cuestionario de calidad que se pasó a los asistentes posteriormente, fue el más valorado . Cuando le preguntaron de qué había hablado a los empresarios dijo: " de cómo motivar a un equipo, cómo dirigirlo no diciendo solo sí, sino a veces no. Como ayudarles a mejorar su propia motivación. Es fácil si estás fascinado por la meta, pero si se limita uno a hacer cosas que no le gustan, nunca estará motivado"
La montaña es lo más parecido a la dirección de un Centro escolar y si reflexionamos o preguntamos sobre el porqué un maestro/a o un profesor/a de Instituto se plantean ser Directores o Directoras , las respuestas, no se si con más o menos sinceridad, no se apartarán mucho de las consabidas: "porque alguien tiene que ser", porque me ha tocado a mi". Cuando un maestro llega a la Dirección tiene el mismo sentimiento y la misma sensación que Messner cuando hacia cumbre: "yo solo pensaba en bajar cuanto antes, en escapar de allí, en buscar sitio más seguro...".
Y es que subir un "ochomil" requiere un buen equipo de personas con buenos sherpas, un buen material, buena climatología y aún así no deberá uno separarse de las "autopistas" o sendas preparadas por otros montañeros que ya ascendieron.
Un Director, una Directora de Colegio deberá pertrecharse de un equipo de confianza para, sin pensar en las funciones que le catalogan en la normativa y sin separarse de las "autopistas" que la administración impone, ser Presidente/a y representante de su centro y de dicha Administración, Jefe/a de Personal de sus compañeros/as, ser gestor/a de recursos mínimos y economista, custodio y archivero/a de lo hayado y fedatario de lo hecho día a día, buen programador/a, planificador/a y estratega para presentar los planes en tiempo y forma, experto pedagogo y didacta, investigador/a e innovador/a para guiar el desarrollo del Proyecto Educativo, orientador/a de actitudes y habilidades. Deberá ser asesor/a de docentes, tutor/a de alumnos/as, confesor/a de Padres o madres, por tanto un buen psicólogo/a. Coordinador/a de equipos técnicos y ciclos, evaluador/a, analista y supervisor/a del Plan de Centro y su desarrollo en las aulas, aprendiz y formador. Será detective, acusador, abogado y juez/a de convivencia. Es imprescindible ser técnico/a en emergencias e informático/a. sanador/a, ATS, portero/a, vigilante/a y guarda. Y todo ello sin dejar de ser diplomático/a, amigo/a y compañero/a. Finalmente debe quedarnos fuerza para ser maestro/a.
Si conseguimos poner en juego con cierta soltura todas estas "profesiones", habremos conseguido "los 14 ochomiles" y estaremos aprendiendo a ser LIDERES, Pero, aunque encontremos tormentas, hagamosló al menos con longanimidad, palabra que lei en el blog de Santos Guerra. Según el diccionario no es otra cosa que: "grandeza y constancia en las adversidades".Nunca una palabra define de manera tan acertada la forma de actuar de los Directores y Directoras de Centros educativos. Seamos longánimos subiendo los ochomiles que nuestro sistema educativo tiene y nunca se nos olvide lo que contestó Messner cuando le preguntaron porqué subió tantas montañas:
" tengo la impresión de que todo lo que hice estaba cerca de lo inútil... pero me ha ayudado a ser mejor persona".
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